06 febrero 2006
We are the Champions

Nunca en la historia de Gran Hermano a habido alguien tan inteligente y estratega. Irónico y maquiavélico, sabía en todo el momento lo que grababan las cámaras, lo que pensaba la gente fuera, como iba a caer mejor y como peor, a qué compañeros cargarse y cómo hacerlo.
Ahora ya empezarán los programas de cotilleos y toda la historia, pero eso es lo de menos. Lo importante es que en una televisión llena de seres vomitivos, el concurso más vomitivo de todos lo ha ganado un tipo que no tiene un pelo ni de vomitivo ni de tonto.